CDT Guardián del Mar: inversión sostenible

Acandí, Chocó

Un paraíso de nuestro maravilloso Caribe colombiano

que en sus playas brinda el refugio más cálido a las majestuosas tortugas Caná y Carey, que perpetúan su especie con su mágico ciclo de anidación.

En el corazón de Acandí,

nuestra alianza con ONG WWF Colombia despliega alas de cambio, protegiendo más de 26 mil hectáreas de naturaleza pura y custodiando 736 hectáreas de arrecifes y corales marinos, el hogar de tortugas que, como guardianas del océano, custodian cada gota de agua.

Salvaguardando

la magia de la vida marina, delfines, mantarrayas, cangrejos, peces y diversas criaturas, encuentran refugio en Acandí, un lugar sagrado donde cada etapa de su ciclo de vida es una celebración de la biodiversidad.
Con manos unidas, se revive el alma del ecosistema, sembrando esperanza en un vivero comunitario de especies nativas. Cada planta que brota es un paso hacia la restauración de nuestro hogar, para un futuro más verde.

Promoviendo

un turismo que escucha el latido de la tierra, con una experiencia transformadora, durante el mágico momento en que tortugas emergen para anidar, instruimos a los visitantes sobre la importancia de proteger este acto de vida.
El “etnoturismo” no es solo un viaje, es un pacto de honor que celebra la diversidad y la riqueza étnica, que aprende de la sabiduría ancestral y se compromete con la sostenibilidad

Protegiendo el legado

natural y cultural de nuestra región, para honrar los territorios ancestrales de nuestras comunidades negras.

Fortaleciendo

el programa de monitoreo de las playas de Acandí, capacitando a los tres consejos de la región, para empoderar a las comunidades negras, vibrantes defensoras de los mares, que con ojos de águila custodian el nacimiento y la travesía de las tortugas marinas.